La seguridad es un tema que le compete a todo aquel que se vea involucrado en una obra civil, empezando por el Estado, hasta llegar al eslabón mas bajo, los obreros.
Las autoridades deben establecer reglas practicas que se apeguen a las normativas internacionales y que se adapten a las necesidades técnicas de cada proyecto. Pero de igual manera se debe tener una inspección constante y de manera responsable para velar por el cumplimiento de estas, sin que influyan las dádivas, las relaciones, ni el estatus social, como ya lamentablemente estamos acostumbrados. Los reglamentos nacionales deberían prescribir las normas aplicables a los Inversionistas, Diseñadores, Arquitectos, Ingenieros y Trabajadores, realizando campañas de información y concienciación al momento de la aprobación o puesta en marcha de los proyectos.
Los empleadores deben facilitar organización adecuada, creando un programa acorde a las leyes y reglamentos nacionales, asegurando el mantenimiento de las instalaciones, el equipo, las herramientas y maquinarias, de forma individual los empleadores deben supervisar periódicamente, para asegurarse que las medidas tomadas a favor de los empleados estén siendo cumplidas por los mismos.
Los empleados, por su parte, deben tener la conciencia suficiente para cumplir con los reglamentos dictados, que han sido diseñados para su propio bienestar.
En ocasiones se puede tener dos o mas contratistas, de áreas diferentes, trabajando en una obra, en este caso estos deben cooperar entre si, para lograr que los objetivos del proyecto sean cumplidos en materia de seguridad y salud, el contratista principal, persona u organismo que ejerza control sobre la obra, es el encargado de velar por la creación de las normas y su cumplimiento.
Para una adecuada seguridad en los lugares de trabajo, se debe tener en cuenta parámetros básicos como:
Medios de acceso adecuados.
Orden y limpieza.
Cuidado en las caídas de materiales y de las personas mismas.
Acceso no autorizado a la obra.
Lucha y planes de prevención contra incendio.
Iluminación suficiente.
Señales de indicación y advertencia.
Inspección y mantenimiento.
Cuando no sea posible garantizar de una forma segura, que no se correrán riesgos de accidente o daños de salud, el empleador está en la obligación de proporcionar al empleado equipo de protección individual “EPI” o equipo de protección personal “EPP” adecuados a los tipos de trabajos a realizar.
Estos elementos de protección pueden ser:
Ropa de Trabajo: Debe ser adecuada a las labores y zona, como por ejemplo:
Ropas, chalecos y sombreros impermeables, en zonas donde las condiciones atmosféricas lo ameriten.
Chalecos salvavidas y boyas cuando se corra el riesgo de caer al agua.
Cuando se esta expuesto al tránsito o maquinaria en movimiento se debe poseer chalecos o accesorios reflectantes, para aumentar la visibilidad.
Calzado de Seguridad: Son de un material bastante resistente, el cual puede ser acero o polímero puro cuando se trabaje con electricidad, que será útil para combatir:
Condiciones atmosféricas adversas.
Objetos que caigan y puedan aplastar los pies.
Sustancias ardientes o peligrosas.
Herramientas cortantes o clavos que pueden ser pisados.
Superficies resbaladizas.
Protectores Visuales: Son gafas de color o claras, caretas, pantalla de soldadura, etc. Se utilizan cuando se puede estar expuesto a lesiones oculares o faciales, provocadas por:
Proyección de polvo o partículas.
Proyección de objetos contundentes.
Sustancias peligrosas o calor.
Resplandor excesivo.
Soldadura.
Perforación de rocas.
Mezcla del hormigón.
Casco de Seguridad: Para proteger la cabeza de lesiones al caerse la persona o de la caída o proyección de objetos, dentro de los cascos de seguridad podemos encontrar diferentes colores, los cuales proporcionan un rango o jerarquía dentro de la obra.
Blanco; utilizado por los ingenieros, arquitectos, administradores, supervisores y maestros de cada área.
Amarillo; utilizado por operadores, albañiles, obreros, ayudantes, etc.
Azul; utilizado por estudiantes en prácticas, asesores técnicos, visitantes de la obra y electricistas.
Verde; utilizado por profesionales de higiene y seguridad o de servicios médicos, también es habitual que lo utilicen las hormigoneras.
Rojo; es utilizado por inspectores de seguridad, así como por bomberos y brigadas de emergencia.
Guantes de Seguridad: Deben utilizarse de manera adecuada, siempre que la actividad lo requiera, en caso de manipular sustancias calientes o químicas, como en la manipulación de materiales peligrosos y dañinos para la piel.
Protectores de Oídos: Cuando se este en el proceso de construcción, en el cual generalmente se utilizan maquinarias que producen mucho ruido, llegando los decibeles a niveles dañinos para el oído humano, se deben utilizar protectores para que sus oídos no sufran consecuencias graves.
Protección Respiratoria: Estos deben ser utilizados para evitar que el polvo llegue a las vías respiratoria y para la protección frente a humos, vapores y gases.
Arnés de Seguridad: Posee amortiguador de impacto y doble línea de enganche, para frenar la caída cuando se trabaja en lugares de altura considerable y el trabajador se encuentra expuesto en bordes o zonas peligrosas.
Lo mas importante no es adquirir los elementos de protección y tenerlos almacenados en la obra, se trata de llevar a cabo un trabajo responsable, el cual debe iniciar con la capacitación, primero de los profesionales encargados de la obra, tarea que le corresponde a las instituciones de formación, a la institución estatal competente o a la compañía constructora; y luego los encargados de la obra deben transmitir estos conocimientos, con el fin de crear una cultura en cuanto al uso de equipos de protección personal se trata.
Si tienen alguna opinión o aporte no duden en comentar.
Fuentes Consultadas: