Las poderosas tormentas pueden azotar el océano con gran fuerza, y esa energía de las olas pueden ser lo suficientemente fuerte como para golpear el fondo marino, produciendo un nuevo tipo de terremoto. Estos terremotos son un tipo de interacción, recientemente identificado, entre la atmósfera, el océano y la corteza terrestre.
A diferencia de los terremotos, que ocurren cuando las placas tectónicas de la tierra se mueven provocando movimientos bruscos en el suelo, la fuerza impulsora que envía estas señales sísmicas son las olas oceánicas que han sido azotadas por un huracán.
Los terremotos producidos por tales tormentas pueden llegar a tener una magnitud de 3.5, poco perceptible para los humanos, pero detectable para los sismómetros.
Los científicos saben que las olas del mar producen señales sísmicas a frecuencias, un fenómeno conocido como “zumbidos de la Tierra”. Sin embargo hay otras señales sísmicas generadas en el océano que no se han entendido bien.
Lo más raro fue que estas nuevas señales sísmicas ocurrían en Invierno y solo en algunas áreas. De modo que se descubrió que las tormentas provocan terremotos en el océano. Aunque no todas las tormentas lo hacen. Sólo aquellas que golpean en regiones a lo largo de la costa donde hay zonas elevadas llamadas bancos oceánicos.
Es algo nuevo con lo que los científicos están lidiando para entender. Y se cree que se necesiten una combinación muy particular de huracán, olas oceánicas y forma del fondo marino para producir un terremoto perfecto.
Información obtenida de: www.ambientum.com
댓글